domingo, 7 de febrero de 2010

La Gran Boda Sij

Nunca olvidaré todo lo que he vivido hoy. Anoche nos llamaron los chicos de "Callejeros" para que les acompañásemos hoy a una boda Sij, a la que les habían invitado mientras paseaban por Old Delhi, y nosotras, que después de cuatro meses en India no hemos conseguido aún asistir a ninguna (tampoco lo habíamos intentado mucho), sin dudarlo aceptamos encantadas.


Hoy nos hemos levantado a las 8 de la mañana, y hemos salido hacia el norte de Delhi, al otro lado del río Yamuna, a un barrio a las afueras donde se celebraba la boda. Tardamos 1 hora en llegar hasta ahí, daba la sensación de estar en un pequeño pueblo y no en la misma Delhi. Llegamos a la casa de la novia, donde nos han recibido con los brazos abiertos y grandes sonrisas. Nos invitaron a entrar, y en seguida nos ofrecieron té y pasteles. Nos presentaron a toda la familia, el papá, la mamá, el abuelo, las hemanas, las tías, los nietos... Era una familia humilde, y María y yo casi nos emocionamos porque esta gente que no tienen muy poco, nos los estaban dando todo. La casa era muy sencillita, y en ella vivían unas 14 personas. En cada piso de la casa por lo visto vivía una familia, e incluso algunos vivían en el tejado. A la boda también han venido algunos familiares de Rajasthan y de otras partes de India. Me ha encantado compartir estos momentos con la familia.
Cuando llegamos, sobre las 10 de la mañana, las chicas aún no se habían vestido, de hecho, ni siquiera habían llegado todos los familiares a la casa. Hemos estado un rato hablando con Rinki, la novia (en la foto la chica de naranja). Rinki tiene 17 años, y el novio 24. El matrimonio de Rinki es concertado, como casi todos los matrimonios en India, y nos han explicado que se conocieron hace 1 año, pero que tan solo se han visto en un par de ocasiones. La chica del sari rosa y azul es una de las mejores amigas de Rinki, y me ha contado que su padre también quiere organizarle un matrimonio concertado, pero que ella no quiere, aunque me contaba que al final tendrá que hacer lo que le mande su padre.
Después de estár un rato charlando con la familia, comenzarón a vestir y a maquillar a Rinki, y la verdad es que el resultado ha sido impresionante, simplemente preciosa.
En la foto abajo, de izquierda a derecha, la amiga de Rinki, María C, Bea y Quique de "Callejeros", Rinki y yo.
Cuando ya estaban todos vestidos ha pasado el novio por enfrente de la de la novia mientras iba de camino hacia el templo Sij donde iba a celebrarse la boda. Venía montado en un caballo muy ornamentado y llevaba la cara tapada por tiras de flores, ya que en India los novios no se pueden ver la cara hasta que están casados. En la puerta de casa de Rinki, se han parado un ratito y han empezado a tocar música y tambores y a bailar las mujeres y los hombres como locos, y por supuesto nosotras no nos hemos podido resistir y nos hemos unido a ellos :) En la foto el novio, sujetando la espada característica de los Sijs. En este momento se ha quitado la cortina de flores que le cubría la cara, pero como veis seguía ocultándose tras un pañuelo.

Cuando el novio ha seguido avanzando hacia el templo, hemos salido todos nosotros con la familia de la novia detrás, aunque Rinki se ha quedado en casa, y se ha
hecho esperar porque ha llegado al templo 2 horas más tarde. En las fotos abajo podeis ver algunos de los familiares de Rinki andando de camino hacia el templo. Una mujer que creo que era una de las tías no me ha soltado la mano en todo el camino. Estos niños tan pequeños de las fotos también tienen su pelo crecido (los Sijs no se cortan el pelo), y les hacen un moño a la altura de la frente que es muy gracioso. Además todos tenían la pulsera de plata que llevan los Sijs, hasta un niño que tenía unos cuatro mesecillos!

Cuando hemos llegado al templo donde se iba a celebrar la boda y la comida, en primer lugar las mujeres que eran familia de la novia se han puesto detrás de la puerta de entrada al templo, con una cinta roja de un lado a otro que el novio tenía que cortar para entrar, y han hecho como una especie de teatrillo, como si al querer entrar el novio, las mujeres de la familia de la novia no le dejasen pasar, y ahí hacen un poco la gracia hasta que finalmente le conceden el pase.

En la parte de abajo del templo había como un sótano donde se celebraba el "banquete", que era todo comida india, y ha habido un momento "avalancha" a por la comida en cuanto la han puesto en las mesas (era como tipo buffet), que me he quedado alucinada. Al principio me daba un poco de desconfianza comer, pero como me han insistido tanto y me parecía de mal rechazarlo, al final he terminado comiendo un poco de todo, que la verdad estaba bastante bueno, así que espero que mi estómago no se revele contra mí :)
En la foto se puede ver al novio esperando a la novia en la sala donde se daban las comidas (y sentado sin moverse de esa silla mientras todo el mundo comía), y ahora si con la cortina de flores cubriendole la cara.
Finalmente ha llegado Rinki (la novia) al templo, y hemos subido todos a la parte de arriba, donde estaba su Gurú o Maestro esperando para casarles. Cada comunidad Sij tiene su propio Gurú, y éste es el que escribe el libro sagrado de cada comunidad, que sería como la biblia en la religión cristiana. Los hinduístas, sin embargo, también tienen miles de Gurús, pero su libro sagrado es único y común para todos ellos. La ceremonia ha sido cortita, y básicamente ha consistido en que el Gurú cantaba una parte del libro sagrado, y en cada canto los novios se levantaban y daban una vuelta alrededor del Gurú. A sido muy impactante esto, porque el novio siempre iba por delante de la novia, y sujetaba una sábana por su hombro, como podeis ver en la foto de abajo, mientras la novia iba detrás de el como si fuese atada a la misma sábana. No sé, daba la sensación de que era una representación como si él estuviese cargando con ella, y ella fuese totalmente sumisa respecto a él.

Rinki ha comenzado a llorar nada más empezar la ceremonia, y también lloraban algunos de sus familiares. Esto es porque a partir de ahora, Rinki pasará a formar parte de la familia del novio, y se irá a vivir con ellos. Además, hablando con un familiar, me ha dicho que Rinki no podrá trabajar en nada porque su novio (ahora marido), no le da permiso, y que su única misión ahora es rezar por su marido y por su familia y estar en la casa. De todas formas también hay quien dice que es deber de las novias llorar en las bodas, y estar como apagadas y tristes, porque esto muestra respeto hacia su propia familia. No obstante, y por mucho teatrillo que hiciesen, los ojos de Rinki no me engañan, y estuvo toda la boda mirando hacia el suelo y muy seria, y ni siquiera miró al novio a los ojos ni una sola vez. Su padre dice que es porque casi no conoce al novio y le da vergüenza, pero bueno, cada uno que piense lo que quiera.



Al final de la boda a Rinki se han escapado un par de sonrisillas, que me encantaron. Ojalá sea muy feliz. Y nosotros estaremos eternamente agradecidos a estas familias que nos han dejado compartir con ellos un momento tan especial en sus vidas, y también en las nuestras.


5 comentarios:

  1. También deseo fervientemente que sean muy felices.
    Hermosa ceremonia, salvando la imposición paterna a Rinki, que es lo único por lo que me rebelo.
    Qué suerte tenéis por compartir estos momentos tan íntimos con dos familias Sij. La hospitalidad india me está dejando sin palabras.
    Lo dicho, que sean muy felices.

    ResponderEliminar
  2. Me ha gustado mucho este post. Como dice el que te sigue, me impresiona la hospitalidad india, la tremenda sociabilidad que muestran con todos vosotros. La novia arreglada con todo tipo de detalles, no he podido evitar fijarme en sus brazos y sus manos, tatuados con henna. Y también me da un poco de pena el hecho de que no conozca a su marido, esperemos que sus padres hayan escogido bien ^^
    Una cosita más, ¡me vas a tener que decir cómo haces para estar cada día más guapa!
    ¡¡¡Te quiero mucho hermanita!!!

    ResponderEliminar
  3. Hola preciosa!!!!!

    Acabo de ponerme al día con tu blog y se me ocurren muchísimas cosas que comentarte sobre tus últimas entradas pero sin duda la que más me ha impactado es esta última.

    Por un lado, qué lección de humildad y genenerosidad por parte de la familia que os acogió! Por otro, como tú bien dices ha tenido que ser un día que no olvidarás jamás puesto que además de permitirte conocer un poquito más ese país y sus gentes, viviéndolo desde dentro, gracias a ello creo que apreciarás aún más si cabe, la libertad de la que gozamos.

    Aunque encuentro ciertas analogías entre su rito y los que suelen celebrarse en nuestro entorno, la esencia del enlace dista enormemente. Me resulta angustioso compartir tu vida con alguien a quien ni tan siquiera conoces, sin tener posibilidad de elegir ni opinar al respecto.

    Otra cosa que me ha llamado la atención es el manto de billetes con el que se cubre al novio.
    Eso sí Rinki estaba preciosa. Como dice PiLuQui, confiemos en el buen ojo de su padre...

    Por cierto, ya nos dirás cuándo te podremos ver en Cuatro!

    Nos acordamos mucho de ti. Sigue disfrutando y cuídate mucho.

    Un besazo!!!!

    PD1.- Cuando quieras reirte un poquito acuérdate de eso que decía: "Yo me llamo Carolina, tiquitiquití, tiquitiquití ... Pues anda que yo me llamo Pepona, tocotocotó, tocotocotó" JEJEJEJEJEJE Qué recuerdos!!!

    PD2.- La tía de ... dice que ha tenido unas semanitas de mucho ajetreo y por eso no te ha podido escribir pero que sigues en su mente.

    PD3.- Acaba de llegar el del anuncio de la puerta del Sol y dice que se ha acordado mucho de ti porque viene de ver una exposición de una fotógrafa india.

    ResponderEliminar